Confidente

no hay nada mejor en el mundo que terminar de hacer la "fechoría" y poderla contar, si!!!,  no se asombren es que nosotras las mujeres amamos contar lo bueno o malo que nos sucede, por eso siempre llevamos un confidente en nuestras vidas.

cuando somos infieles entre menos personas sepan mucho mejor,  sin embargo siempre necesitamos de alguien que nos escuche y que nos diga lo que ya sabemos pero que queremos siempre escucharlo de otra boca, y es que no precisamente queremos ese confidente para que nos reproche, eso jamas. Lo tenemos porque disfrutamos y sobre todo necesitamos que otr@ nos escuche cuando más lo requerimos.

en la infidelidad hay momentos felices, excitantes, amargos y hasta vergonzosos y en todos esos momentos es cuando más queremos que nos escuchen, nada mejor en el mundo que siempre tener quién nos escuche y sobre todo que no nos juzgue.

los confidentes se hicieron para alegrar el cuerpo, la mente y el alma cuando más lo necesitamos.

Queda el tiempo suficiente

las mujeres siempre necesitamos una excusa para ser infieles, para nosotras no existe mejor satisfacción que ser infiel sin pensar en el otro,  y es que la mayoría de las veces la infidelidad es sinónimo de culpabilidad, pero cuando se hace con excusas se disfruta es por ello que descubrimos que tener un romance extra a nuestra relación de pareja nos produce sentirnos más amadas y logramos disfrutarlo a plenitud.

las mujeres somos expertas en fingir, incluso cuando estamos a punto de reventar por dentro y nos toca mostrarnos ante el mundo fuertes, tenemos la facilidad de esconder lo que sentimos sin que nuestra pareja sospeche la tuza que llevamos dentro.

por tanto lo único que requerimos para sobrellevar la tuza es una buena amiga que nos escuche y comprenda a plenitud, lo que menos queremos son reproches solo necesitamos que nos digan lo que ya sabemos.

amar a dos no resulta tan difícil. 

La infidelidad no resulta ser tan fácil

Las mujeres infieles hacen curso de actuación para desenvolver varios papeles en un mismo personaje, emociones que esconden y que solo quedan en el fondo de los pensamientos, vivir en la infidelidad no es tan fácil como aparentan en ella se tiene que sentir y sufrir por dos.

Cuando tenemos nuestro novio o esposo debemos saciar necesidades para que la relación marche a plenitud y nos toca hacerlo así estemos muriendo por el otro, así nos estemos muriendo de ganas por ver, escuchar o sentir al otro, esto no es masoquismo esto es en verdad ser infiel.

Actuamos de tal forma que nuestra pareja no se entera si estamos sufriendo, si estamos felices, si es verdad que estamos cansadas por el estrés del día cuando en verdad estas muriendo porque no hemos podido escuchar a esa otra persona.

Amar a dos resulta siendo tarea difícil de asumir y que muy pocas pueden manejar, mantener a dos vidas contentas y saciar dos necesidades más la propia es complicado, ese es el papel que hacen a diario las novias y esposas que por fuera transpiran corazones y por dentro están llenas de lujuria y placer.

A quién no le ha sucedido que ha peleado con esa segunda persona, segunda porque por lo general todas las mujeres enumeramos a nuestros amores para diferenciar y sobre todo para guardar un lugar;  siempre uno es más importante que el otro, hemos peleado con dos y nos toca fingir ante el uno que estamos regias, tarea que solo pocas han asumido y logran pasar preguntas por parte de uno como: “qué te pasa”, “por qué estas tan cayada” etc.

Somos infieles nos gusta y nos agrada inventar sucesos cotidianos con tal de vivir a plenitud cada acontecimiento que conlleve al amor. 

Soy infiel y me gusta

Ser infiel para muchas es establecer relaciones sexuales con una persona externa a nuestra relación de pareja, sin embargo para otras el placer de mirar, la inquietud de tocar o de simplemente hablar por medios electrónicos con un tercero produce la sensación de estar siendo infiel.

¿Pero que es exactamente ser infiel?, saciar momentos apasionantes con otros descubrir que el sexo va mas allá de lo que cada uno puede vivir con su pareja común, descubrir que para amar no solo se necesita vivir de diario con alguien también se puede amar en la cama y a escondidas.

Dicen que para que un secreto siga siendo secreto no se le puede contar a nadie sin embargo para nosotras las mujeres contarle a nuestra amiga que estamos siendo infiel es una sensación colosal, narrar paso a paso lo que vivimos sentimos y descubrimos en nuestra relación de infidelidad nos produce placer.

Ser infiel no indica que dejemos de amar a nuestra pareja por el contrario muchas veces fortalece ese amor, ser infiel es sencillamente la manera que encontramos algunas mujeres de disfrutar el privilegio de ser mujeres y de querer disfrutar al máximo la oportunidad de amar a dos al mismo tiempo.

Por eso ser infiel no siempre indica sexo o amar, ser infiel para cada una de nosotras involucra una cosa diferente,  entonces ¿qué es para ti exactamente ser infiel?, ¿te produce placer descubrir nuevas miradas en un bar, en una conferencia, en un congreso, en tu universidad, en el trabajo etc. Y aun estando al lado de tu pareja?.

¿Te gusta llamar la atención ante un hombre que ves en el pasillo de la discoteca, te gusta admirar a otros hombres diferentes a el tuyo y hasta sus propios amigos, te has llegado a imaginar teniendo sexo con algún tipo desconocido pero cuando lo viste en la puerta del centro comercial sentiste que lentamente tus calzones empezaron a caer?.

Lo anterior son respuestas que solo cada una de nosotras nos podemos dar.

Yo amo ser infiel y tú?.